Y de repente...

Anoche, despierta hasta las 02.35 de la madrugada viendo uno de los mejores conciertos que he podido ver en mi vida (en la televisión).
Final del Rock in Río (que menos rock es de todo lo demás) (o como nosotros decimos Pop in Charco).
Gran final: Sôber, Motörhead y Metallica.
Grandes conciertos los de Motörhead y Metallica, pero con el que se me puso la carne de gallina fue con Sôber.

Me estremecí una y otra vez.


Con cada canción se me abría el cierlo.
Con cada tema sentía como una fuerza me hacía sacar lágrimas, pero no lágrimas de pena, ni de desesperación; sino, de alegría, de emoción.
Cada una de las canciones se reflejaban en un momento de mi vida.
Todos y cada una unidas contaban mi vida al completo.
Narraban todos los momentos que he vivido.

Y de repente, lo vi claro...
Voy a marcar algo en mi piel. Algo que refleje todo lo que siento en un simple símbolo. Pequeño... grande... NO LO SÉ. Sólo sé que lo voy a hacer...
Llevo muchos años pensándolo; y en un simple instante lo vi todo claro.

Muchos me tacharán de loca, otros de valiente, y otros simplemente no me tacharán; pero me da igual, es lo que quiero y así lo siento.

¿Cuándo lo vas a hacer?
¿Cuándo te vas a atrever?

Ya estoy segura, completamente segura...

¿Pero, cuándo?
No lo sé, pero pronto (espero...)

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